O Champagne de añada es aquel que se embotella solo porque su nivel de calidad es óptimo y no necesita de coupage. Algunas marcas solo embotellan las grandes añadas, otras embotellan los buenos años. Habitualmente necesitan de 6 a 10 años de reposo antes de su comercialización. Las últimas grandes añadas son el 2010 y el 2015